¿Qué creen? ¡Al fin daré una opinión sobre este polémico tema!.
¿Por qué polémico? Bien, resulta que esta postura ha enfrentado a muchas personas en acaloradas discusiones donde el debate se mueve entre la estrategia y la conveniencia.
Antes que nada recuerda que si quieres aprender del mundo de la consultoría y el asesoramiento, no olvides registrarte en esta página y en mis redes sociales, que usualmente las encuentras así: @doncamilocontador.
No solamente cuando se inicia en el mundo laboral sino cuando se pretende explorar las tierras de la independencia, existe un punto de partida, un pececillo que muerde la carnada, una primera persona que necesita de nuestro conocimiento y es nuestro menester enamorarla en el sentido profesional para que se convierta en nuestro cliente.
La estrategia.
Para muchos, este punto de partida es la carnada que coloca el pescador en el anzuelo y de lo apetitosa que le parezca al pez dependerá que sienta la atracción suficiente para morder y caer en nuestro plato. Pero ya no hablemos más de comida, hablemos de estrategias comerciales... y es que ese proceso de enamoramiento inicia con la primera oportunidad de interlocución con el que queremos sea nuestro cliente. Algunas personas consideran que este primer encuentro es el momento para mostrar dominio y hablar con propiedad sobre los temas consultados. En esa primera cita, la persona que realiza las consultas puede convertirse en nuestro cliente y tal como en la primera cita romántica con la persona que nos gusta, exhibimos nuestra mejor cara en todos los sentidos y por ello no suele ser cobrada por muchas personas.
Si eres de los que optan por la estrategia de no cobrar por este primer momento de fama, debes estar atento a realizar la estadística de cuántas de esas personas te vuelven a buscar y se convierten en tus clientes. El monitoreo es una de las actividades más importantes que debemos llevar a cabo en nuestros procesos de mercadeo, porque del resultado de esta estadística de seguimiento puede depender a futuro la continuidad o el cambio de la estrategia.
La conveniencia.
Ten en cuenta que vivimos en Colombia o bueno, somos latinos para darle mayor extensión a mis palabras; porque estoy completamente seguro que me leen fuera de mi país y logro cierto nivel de identidad con mis letras.
Retomando la idea, nuestra cultura latina incorpora algunas prácticas asociadas a las expresiones "malicia indígena" o "el vivo vive del bobo", de allí que es común encontrar personas que en esta primera consulta realizan las preguntas con tanto nivel de detalle que al ser contestadas de manera precisa, consiguen solucionar su inquietud y con suerte les volvamos a ver el día del juicio final... si, si, si, resultado de la operación: se le solucionó la inquietud y si te vi, no me acuerdo. Pero eso no es lo peor, lo peor es que esa persona le dirá a otra: -Contacte a este sujeto, que lo reciba en su despacho o en el Juan Valdéz, pregúntele todo muy puntual que le va a responder todo y no le cobra un peso-.
Dicen que una buena estrategia para llegar al corazón de una dama consiste en escucharla. Bien, en ese orden de ideas considero que esa primera sesión con la persona que queremos que sea nuestro futuro cliente, debe ser aprovechada para escuchar su caso, para hacer preguntas adicionales que lleven a que la idea sea aún más clara y dar pequeñas luces de nuestra pericia para la solución de la problemática planteada, mostrando seguridad e inteligencia al preguntar, evitando preguntas obvias o que puedan dejar en evidencia nuestro desconocimiento del tema. Este mapeo general nos ayudará a encontrar la solución más precisa y adecuada, esa que no debemos dar en esa primera sesión sino en una posterior o posteriores cuando ya exista un acuerdo económico firmado y hasta un anticipo económico previamente pactado. Pienso que bajo la premisa descrita en este párrafo, no debería ser cobrada esa primera vez.
Si, yo soy de los que cobra esa primera consulta, a excepción de los casos en los cuales logro orientar la conversación de la manera descrita en el párrafo anterior.
Espero les haya gustado.